miércoles, 15 de julio de 2009

Transformers: revenge of the fallen, Megan Fox y más

No sé si será una pregunta recurrente pero a mí me la hacen siempre en la tercera o cuarta cita, cuando ya se acabaron las confesiones actuales y las espectativas futuras; y solo queda hablar del pasado: ¿Qué programas te marcaron? Entonces siempre respondo que mi primera infancia le pertenece a dos dibujos animados: Transformers y Thundercats.

Por eso cuando escuché por primera vez que los nobles autobots tendrían sus pares en la pantalla grande sentí una intensa contradicción: la ilusión frente a la desilusión. La ilusión de ver pronto a los héroes de mi generación transformados en seres más verosímiles que los dibujos animados; y la desilución de saber que ninguna película superará alguna vez la fuente original de las que beben.

Vi la primera película de Transformers. Me gustó.
Acabo de ver la secuela.

La publicidad antes del estreno estuvo a cargo de Megan Fox. Se explotó su imagen sensual, apareció en todos las publicaciones y su nombre a lo largo de los últimos meses estuvo vinculado siempre a la aparición futura de Transformers, the revenge of the fallen.

Como crítico digo que:
La película no empieza bien. La acción tarda en llegar. Las secuencias se hacen predecibles. La imagen de Megan Fox adquiere mayor relevancia pero a pesar de ser extremadamente bella resulta injustificada.

A nivel visual, la secuela tiene los mismos problemas que la primera: cuando los robots de ambos bandos luchan "cuerpo contra cuerpo" no se logra distinguir claramente quién es quién y solo se alcanza a ver un remolino de metales.
El argumento es simple, lineal y no alcanza picos de intensidad ni conmoción.

Como fan digo que:
Lo más importante fue volver a ver al gran Optimus Prime, el último de la distanía robótica de los Prime. Ver cómo se erige triunfador sobre el siempre peligroso Megatron.

Esto bastó para no arrepentirme, para salir sonriente del cine. Y entonces me pregunto si más que una película de calidad, los espectadores buscamos una película cómplice, una película empática, una película que nos identifique o que identifique parte de nuestras vivencias.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. De chica siempre me rehusé a mirar Los Transformers, pero lo hacía, aunque hubo muchas más series que disfrutaba más, como los Thundercats, no ha llegado el día en que conozca a alguien que no los haya disfrutado!.

    La película parece bien hecha a pesar de todo, y no, ninguna película superará alguna vez la fuente original de las que beben, sucede no sólo con películas basadas en dibujos o series, si no también con libros, nunca lo leas antes de ver la película, sólo será una desilución, de todas formas vamos y volvemos tratando de decir :"no, no fue lo mismo...Pero Estuvo Buena Igual!" ajajjaja

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